INSTITUCIÓN EDUCATIVA
JORGE ELIÉCER GAITÁN AYALA
“Trabajamos
por el desarrollo del ser humano”
GESTIÓN ACADÉMICA
GUÍA DE ESPAÑOL GRADO 5° Sede Marco Antonio Pinilla Docente Herly
Gutiérrez
COMPETENCIA:
Relaciona las hipótesis predictivas que
surgen de los textos que lee, con su contexto y con otros textos, sean
literarios o no.
OBJETIVO: Comprender las características de los
apólogos mediante ejemplos de lectura.
EL APÓLOGO
Características del apólogo
- Suelen escribirse
en prosa.
- Son de carácter
explicativo y tienen una extensión mediana o extensa.
- No utilizan
lenguaje técnico o formal.
- Utilizan relatos
que se asemejan a hechos reales.
- No son historias fantásticas,
sino que sus hechos son creíbles y cotidianos.
- Su objetivo es
dejar una enseñanza moral y perfeccionar el autoconocimiento y la
reflexión del lector u oyente.
Ejemplos de Apólogos
1.
El anciano y el cuarto nuevo
Cuenta la
historia que un anciano acababa de enviudar cuando llegó al asilo, su nuevo
hogar. Mientras el recepcionista le informaba sobre las comodidades de su
cuarto y la vista con la que contaría en dicha habitación, el anciano
permaneció por unos segundos con la mirada perdida y luego exclamó: “Me gusta
mucho mi nuevo cuarto”.
Ante el comentario
del anciano, el recepcionista le dijo: “Señor, aguarde que en unos minutos le
mostraré su cuarto. Ahí podrá evaluar si le agrada o no”. Pero el anciano le
respondió rápidamente: “Eso no tiene nada que ver. No importa cómo sea mi nuevo
cuarto, yo ya he decretado que mi nuevo cuarto me gustará. La felicidad se
elige por adelantado. Si me agrada o no mi cuarto no depende del mobiliario o
la decoración, sino de cómo yo decido verlo. Yo ya he decidido que mi nuevo
cuarto me agradará. Esa es una decisión que tomo cada mañana al levantarme”.
2. El turista y el hombre sabio
En el siglo
pasado un turista fue a visitar El Cairo, en Egipto, para conocer al anciano
sabio que vivía allí.
Al ingresar
a su casa, el turista se percató de que no había muebles, vivía en un pequeño
cuarto muy simple donde solo había unos cuantos libros, una mesa, una cama y un
banco pequeño.
El turista
se asombró por la escasa posesión de sus bienes. “¿Dónde están sus muebles?”,
preguntó el turista. “¿Y dónde están los suyos?”, respondió el sabio. “¿Mis
muebles? Pero si yo solo estoy de paso”, se asombró aún más el turista. “Yo
también”, le contestó el sabio, y agregó: “la vida terrenal es solo temporal,
pero muchas personas viven como si fueran a quedarse eternamente aquí y se
olvidan de ser felices”.
3.
El sultán y el campesino
Cuenta la
historia que un sultán salía de las fronteras de su palacio cuando y al cruzar
por el campo se encontró con un anciano que plantaba una palmera. El Sultán le
dijo: “Oh, Anciano ¡Qué ignorante eres! ¿No ves que la palmera tardará años en
dar sus frutos y tu vida ya se encuentra en el ocaso?”.
El anciano lo miró con
bondad y le dijo “¡Oh, Sultán! Plantamos y comimos. Plantemos para que coman”.
Frente a la sabiduría del anciano el Sultán, sorprendido le entregó unas
monedas de oro en señal de agradecimiento. El
anciano hizo una pequeña reverencia y luego le dijo: “¿Has visto? ¡Qué pronto
ha dado sus frutos esta palmera!”
ACTIVIDADES
DE COMPRENSIÓN: Resuelve las preguntas en el cuaderno
1. ¿Qué es un apólogo?
2. ¿Cuáles son las características del
apólogo?
3.
¿Por qué
los tres textos anteriores se consideran Apólogos?
4.
¿Qué
enseñanza me deja cada uno de los textos anteriores?
5.
Realizo una
descripción breve del anciano.
6.
¿Por qué el
sabio vivía en un cuarto pequeño y muy simple?
7.
¿Quién es
un sultán?
8.
¿En qué
crees que se diferencia la fábula de un apólogo?
Profe los apólogos de la fui
ResponderEliminarSon muy chebere y bonitos
Me gustan muchisisisimo